La fuerza, el nueve de espadas, el dos de oros
Como dice Goethe: “Hasta que uno se compromete, existe la duda, la posibilidad de retirarse”
Para alcanzar nuestro objetivo hay que comprometerse con él. Esto da fuerza. La mayoría de las veces una parte de nosotros quiere, pero hay otra que no, tal vez por el miedo que producen creencias como: “si me comprometo no soy libre”.
¿Entonces no soy libre de comprometerme?
¿Qué viejas creencias nos limitan? ¿Qué nueva creencia necesita nacer para dar paso a la posibilidad?
Las creencias también viven en ciclos: Nacen, crecen y mueren para que otras tengan lugar. Las viejas ideas deben ser honradas para que las nuevas nazcan libres.
Jamás una idea fue inútil, solo perdió su contexto.